Cerca de 2 mil empleos están en riesgo de perderse debido al nuevo esquema fiscal que entró en vigor el 1 de enero que desaparece la figura de “impresor autorizado”, lo cual repercutirá en la permanencia en el mercado de más de 120 imprentas oaxaqueñas que están dadas de alta ante el Sistema Tributario de Administración (SAT), alertó Orlando Rodríguez.
La falta de una información adecuada provocó que un amplio sector de los contribuyentes y que son clientes de las imprentas autorizadas, concibiera la idea de que a partir de este año ya no se podrían imprimir comprobantes fiscales en papel y que únicamente serían de manera electrónica, situación que no es correcta, indicó.
En conferencia de prensa, junto con un grupo de impresores locales, subrayó que un universo de entre 200 y 300 imprentas, resentirán esta situación, a pesar de que la impresión de comprobantes fiscales sigue de una manera casi normal, con las excepciones que indica el nuevo esquema fiscal.
Recordó que esta actividad es parte de un oficio donde familias completas están involucradas para obtener el sustento familiar, y que la decisión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) no contribuirá a combatir la evasión fiscal, ni la clonación de los comprobantes.
Sobre todo en una entidad que como Oaxaca enfrenta serias dificultades para acceder a la tecnología, lo cual complica seriamente la puesta en marcha de un sistema de facturación electrónica, como buscan aplicar en estados con mayor desarrollo, dijo.
La afectación va más allá, ya que algunos propietarios de imprentas tendrán serios problemas para pagar los créditos que contrajeron al adquirir los implementos necesarios para la impresión de las facturas autorizadas por Hacienda.
Consideró que el trabajo disminuirá entre 70 y 80%, ya que 90% de las imprentas se dedica a la impresión de comprobantes fiscales, “ahora rogaremos porque exista trabajo oficial y de todo tipo para poder soportar esta situación”, indicó.
Fuente: Humberto Torres/El Imparcial
