El presidente del Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas (CEDHAPI), Maurilio Santiago Reyes, comentó que han detectado una banda de tráfico de infantes que opera en tres municipios mixtecos, los cuales son; Tlaxiaco, Putla y Juxtlahuaca.
Dijo que el gancho para que los infantes caigan en este tipo de vida, es por la pobreza extrema en la que viven, y ante la falta de un empleo ellos buscan vivir en mejores condiciones, por lo que personas que ofertan empleos con atractivos sueldos y con buenas condiciones de vida, son los ellos que se llevan a los infantes a las grandes urbes a trabajar de manera ilegal, llámese Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey, Chihuahua, Tijuana o incluso a la Unión Americana.
Señaló que ya en esos lugares los infantes son obligados a prostituirse, pues si no les amenazan con lastimar a sus familiares, pues antes de que sean reclutados las personas que se dedican a esta actividad investigan todos sobre ellos por lo que existe una amenaza constante y la violencia que se ejerce contar ellos es inevitable.
Expresó que cifras reales sobre esta situación, pero es un hecho que existen personas que operan en las localidades antes mencionadas para traficar a los infantes y luego prostituirlos, violentando sus derechos, por lo que es el gobierno del Estado y Federal el principal responsable de dicha actividad, ya que no se ha realizado ninguna actividad para combatir esta problemática social que se agudiza todavía más con la crisis económica por la que atraviesa el país.
En este sentido comentó que “los niños no se involucran en esta actividad por gusto, tiene sus fundamentos y sus causas, las cuales son la pobreza, pues ésta es la detonante de muchas problemáticas en la actualidad, sabemos que la crisis que se vive en los Estados Unidos repercute directamente en las comunidades más marginadas del estado de Oaxaca”.
Afirmó que el tema de la prostitución es muy delicado, pero existen redes vandálicas operando en diferentes puntos, en donde las personas desconocen la verdeara situación, comentó que la mayoría de los niños que son prostituidos en otras ciudades hablan su lengua materna, y en son originarios de comunidades indígenas.
Recalcó que otro fenómeno social que se está dando en las comunidades es la trata de mujeres en donde los padres de familia buscan vender a su hijas por unos cuantos pesos, pues esto les ayuda a dar un sustento económico a sus hogares, aunque desconozcan a quien se las vende, dijo que esto también se debe de combatir a través de la asesoría a las comunidades indígenas.
Finamente aclaró que hasta el momento CEDHAPI no tiene demandas registradas por prostitución infantil pero sin embargo es una realidad que se presenta en las comunidades. (Lesli Aguilar/IGABE)
