“Si no impulsamos desde ahora una cultura ecológica encaminada a proteger nuestros bosques, en breve vamos a padecer los efectos devastadores del calentamiento global”, consideró Carolina Aparicio, presidenta de la comisión permanente agropecuaria y forestal del Congreso del Estado.
Subrayó que no hay cifras confiables en cuanto a la destrucción del bosque, porque las autoridades estatales y federales manejan diversos porcentajes, “pero nos podemos dar cuenta que año con año hay zonas más desérticas”.
“Nosotros mismos podemos constatar cómo hay cerros pelones, y en las carreteras de la Sierra Sur, Costa, Sierra Norte o incluso en la Mixteca, nos encontramos con camiones cargados de madera, incluso en los Valles Centrales han aumentado los aserraderos por todos los rumbos”, precisó.
La riqueza forestal se está acabando, incluso el fenómeno que se vive en La Mixteca se repite en otras regiones del Estado, pero no se hace nada para detener esta tala irracional, aunque muchas veces las autoridades las justifican bajo el esquema de “aprovechamiento forestal”.
Sin embargo, es evidente que los propios campesinos también destruyen el bosque para incorporar las áreas forestales a la agricultura, y más en este tiempo cuando sus parcelas han dejado de ser productivas, por eso es necesario generar esta cultura de protección ecológica.
A su vez, el diputado Martín Vela Gil, estimó que es necesario que el Gobierno instrumente una cultura de protección al ambiente, ante la devastación de los bosques en varias regiones del Estado, en donde su aprovechamiento sería una alternativa como en pueblos de la Sierra Norte. (Samuel Gómez/El Imparcial)
