domingo, marzo 3

Arde Oaxaca

El “mounstro de mil cabezas” apareció acompañado del fantasma de 14 junio del 2006; 11:42 horas, en la primera calle de Guerrero, se escuchó el primer petardo que lanzaron las fuerzas federales para contrarrestar la ofensiva de los maestros de la Sección 22

Las víctimas
Los choques cuerpo a cuerpo de maestros, infiltrados, células de la llamada APPO, dejaron saldo de heridos entre ellos Marcelino Coache.

El sacrificado
El secretario de Seguridad Pública Marco Tulio López Escamilla, trató de llegar a la negociación pacifica con los embravecidos manifestantes, fue abandonado con un solo escolta quien lo cubrió, al ser golpeado hasta hacerlo caer al piso en donde iba a ser rematado.

El fantasma de 2006 volvió al Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca, los maestros de la Sección 22 del SNTE se volvieron a enfrentar con policías municipales, estatales, federales y elementos del Estado Mayor Presidencial (EMP) que resguardaban el Zócalo, tras la visita del presidente Felipe Calderón.
Todo empezó alrededor de las 11 horas de este martes, cuando al menos 80 profesores se manifestaron sobre las esquinas que forman las calles de Guerrero y Armenta y López.

Los maestros gritaban consignas en contra del presidente Felipe Calderón, a quien acusan de privatizar la educación pública y del aumento a la gasolina.

11:30 horas. Los ánimos se calentaron cuando los elementos de la Policía Federal que se encontraban sobre la calle de Guerrero lanzaron gases a los maestros.
En respuesta, los manifestantes encararon a los elementos policiacos, quienes hasta ese momento sólo respondían con chorros de gas.

Justo a las 11:42 horas, cuando Calderón se trasladaba al Hospital de la Niñez Oaxaqueña después de haber inaugurado las instalaciones de la Universidad La Salle en Santa Cruz Xoxocotlán, un mando del Estado Mayor Presidencial dio la orden, “no los dejen pasar, échenles gas”.

Como si cargara con el fantasma de 2006, la irresponsabilidad de este elemento fue lo que provocó que la bomba estallara de nueva cuenta en el Centro Histórico.
El primer choque entre los maestros y los policías estatales y federales se dio entre las calles de Guerrero y Armenta y López, donde se reportaron al menos dos policías y 10 profesores heridos.

La golpiza fue brutal hacia los manifestantes, el vocero de la Sección 22, Gabriel Melitón y su compañera Lorena Luz González resultaron gravemente heridos.
El enfrentamiento llegó hasta las esquinas de Fiallo y Guerrero, donde los petardos, gases lacrimógenos y piedras hicieron blanco en la escuela Primaria “Basilio Rojas”, donde cientos de pequeñines se encontraban recibiendo clases.

Los catedráticos tuvieron que resguardar a los estudiantes en un lugar seguro y en los minutos que los ánimos se calmaron, los padres de familia fueron a rescatar a sus hijos, quienes con llanto en los ojos abandonaban su centro educativo.

Después de hacer la evaluación de los daños y constatar el estado de salud de sus compañeros, el secretario general de la Sección 22, Azael Santiago Chepi arremetió contra el gobierno de Gabino Cué Monteagudo, “por permitir este tipo de situaciones y al gobierno espurio de Felipe Calderón”.

“Creo que esto trae como resultado que pueda suscitarse otro 2006 y de nueva cuenta se pone en riesgo la gobernabilidad en Oaxaca”, señaló.

Como si sus palabras hubiesen alentado a sus compañeros, de un momento a otro los maestros se empezaron a reagrupar y en cuestión de minutos ya eran al menos 500, apoyados por los integrantes de la organización 14 de Junio.

13:30 horas. En otro intento por ingresar al Zócalo, los maestros marcharon hacia la calle de Guerrero, donde los policías ya los esperaban.

Tras avanzar media cuadra, los elementos policiacos los pararon y volvieron a hacer uso de gases lacrimógenos que hicieron retroceder a los profesores, quienes con el ánimo encendido pretendieron quemar las instalaciones del restaurante El Vitral, lanzando bombas molotov.

Aunque no lograron su objetivo siguieron con sus protestas, unos por Guerrero y otros por la Alameda, donde se suscitó otro enfrentamiento con la Policía Federal.
Después de 15 minutos de refriega, hasta el lugar llegó el secretario de Seguridad Pública estatal (SSP), Marco Tulio López Escamilla, quien indicó a los manifestantes que en cuestión de minutos los dejarían pasar al Zócalo.

Los que hicieron caso omiso a las palabras del Secretario fueron sus propios elementos y los de la Policía Federal, quienes nuevamente se enfrentaron sobre Guerrero cuando los maestros ya se disponían a ingresar a la plaza central de la capital.

De nueva cuenta, el titular de la SSP pretendió dialogar, pero en esta ocasión fracasó y también lo recibieron a pedradas y a golpes; despavorido mejor emprendió la huída, al mismo tiempo que Marcelino Cuache, ex dirigente de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), caía malherido.

El enfrentamiento se recrudeció con destrozos en los bancos, tiendas departamentales, autobuses y hasta una camioneta del Gobierno del Estado que quedó prácticamente destrozada.

Enardecidos, los manifestantes encararon a un grupo de agentes federales que resguardaban la calle de Colón, donde retuvieron a tres mujeres policías.
16:00 horas. Los elementos policiacos se replegaron hacia el Templo de Santo Domingo, ya que en esos momentos el presidente tenía una comida con funcionarios y empresarios locales, en el Jardín Etnobotánico.

Sobre el Andador Turístico, como si fuese uno de esos días sangrientos como en el 2006, se daba otro cruento enfrentamiento entre maestros y la policía.

Una vez que los maestros se adueñaron del Zócalo, gritaban consignas contra el gobernador Gabino Cué Monteagudo: ¡Ya cayó, ya cayó, Gabino ya cayó!.
Más tarde, los manifestantes prendieron fuego a un tráiler que se encontraba en las inmediaciones de la Alameda, sobre la calle de Hidalgo.

19:00 horas. Los recuentos de los daños eran de al menos 20 detenidos, 10 lesionados, entre ellos un periodista y aunque aún no se confirmaba, ya se hablaba de un muerto, en tanto las agentes retenidas fueron rescatadas por sus compañeros de la PFP. Andrés Carrera Pineda/El Imparcial

Share.

Comments are closed.