Cerca de 100 menores de edad de la comunidad de San Juan Copala, ya han perdido dos ciclos escolares, debido a que unas 700 personas siguen desplazadas, alertó Nora Martínez Lázaro, coordinadora de la organización, Barca.
En entrevista, mencionó que será el próximo 27 del presente mes, cuando la Secretaría de Gobernación (Segob), desplazados y autoridades locales, definirán el destino de los simpatizantes del municipio “autónomo”.
De la misma forma, destacó que hasta el momento un centenar de niños y niñas de primaria y secundaria no han podido acudir a clases de manera normal, dado que no hay condiciones de seguridad.
Por lo cual, las instituciones educativas permanecen cerradas y sin integrantes de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), desde hace dos ciclos escolares.
Añadió que los funcionarios de la Unidad de Protección para la Defensa de los Derechos Humanos de la Segob, quienes en conjunto con el estado, valorarán el regreso de los desplazados.
“Primero tendrán que valorar la situación en materia de seguridad, servicios, hogares, educación, alimentación y salud, con el ánimo de no llevarlos otra vez a sufrir a la comunidad”, reiteró.
La defensora de los derechos humanos apuntó que es vital lograr la pacificación de la zona, para después buscar nuevos mecanismos que permitan el regreso de cientos de desplazados triquis.
“Nosotros como Centro de Defensa de los Derechos Humanos Bartolomé Carrasco Briseño, daremos el acompañamiento a los simpatizantes del municipio autónomo de San Juan Copala”, subrayó.
Cabe señalar que desde hace un año, la situación social y política en la comunidad indígena de San Juan Copala, se incrementó al desatarse una ola de crímenes entre militantes de las tres organizaciones con mayor presencia, MULT-MULTI y Ubisort.
Carlos Alberto Hernández/El Imparcial
